lunes, 31 de octubre de 2022

Estamos asistiendo al nacimiento de un nuevo orden mundial en el que Occidente tendrá que vivir dentro de sus posibilidades

 

Serguéi Karaganov

RT.com

Por el profesor Serguéi Karaganov, presidente honorario del Consejo de Política Exterior y de Defensa de Rusia, y supervisor académico de la Escuela de Economía Internacional y Asuntos Exteriores de la Escuela Superior de Economía (HSE) de Moscú.

En el Foro Valdai de la semana pasada, en Moscú, fui invitado a intervenir en una sesión titulada "El mundo que se desmorona: Lecciones para el futuro de la crisis político-militar de 2022". Este evento se ha convertido en un líder de la comunidad intelectual internacional en lo que respecta a los asuntos mundiales del presente y del futuro. Pero el título de la sesión me generó dudas, aunque no protesté.

La crisis no empezó en 2022, sino a mediados de los años 90, al igual que la Segunda Guerra Mundial comenzó realmente con el Tratado de Versalles posterior a la Primera Guerra Mundial, que fue injusto y sentó las bases de lo que luego ocurrió.

Hace casi tres décadas, Occidente se negó a llegar a un acuerdo justo con la Rusia postsoviética. En su lugar, como le pareció a muchos en aquel momento, creó un nuevo sistema de dominación basado en las llamadas "reglas".

Otros se refirieron más tarde a él como imperialismo liberal global. Pero estaba construido sobre arena. Contenía una mina terrestre de la Tercera Guerra Mundial que tarde o temprano explotaría. Los veteranos como yo tienden a almacenar recuerdos, a menudo mal recordados, pero desde 1996-1997 he dejado constancia de que un mundo basado en la expansión de la OTAN y la dominación occidental conduciría a la guerra.

La hegemonía liderada por Estados Unidos comenzó a desmoronarse en 1999, cuando, en un aturdimiento de impunidad, el bloque violó Yugoslavia. El desmoronamiento fue a más cuando, eufórico, se metió en Afganistán, luego en Irak y perdió, devaluando su entonces superioridad militar y su liderazgo moral. Al mismo tiempo, se producían dos procesos aún más importantes. Rusia se convenció -después de Yugoslavia, Afganistán, Irak y la retirada de Estados Unidos del Tratado ABM [sobre misiles antibalísticos]- de que era imposible construir una paz justa y duradera con Occidente, y comenzó a restaurar su poderío militar.

Así, una vez más, como había hecho Moscú en el pasado, comenzó a patear los cimientos de la dominación occidental en las esferas económica, política y cultural mundiales, que se basaba en la superioridad militar. Este dominio duró 500 años y empezó a desmoronarse en los años sesenta. En la década de 1990, debido a la caída de la URSS, parecía haber regresado, pero ahora Moscú ha empezado a sacudir de nuevo sus cimientos.

Al mismo tiempo, Occidente pasó por alto el ascenso de China. Paralelamente, se cometió un error aún más sorprendente. A finales de la década de 2000, empezó a contener simultáneamente a China y a Rusia, empujándolas hacia un único bloque político-militar que combinaba sus intereses fundamentales.

Una manifestación de ello fue la crisis económica de 2008, que tuvo como telón de fondo los procesos mencionados y socavó la confianza en el liderazgo moral, económico e intelectual de Occidente.

Desde finales de la década de 2000, Occidente ha estado creando las condiciones para una Guerra Fría. Pero todavía había una oportunidad para acordar con Rusia y China los términos del nuevo mundo. Existía entre 2008 y 2013. Pero no se aprovechó. Desde 2014, el bloque liderado por Estados Unidos ha intensificado su política activa de contención de China y Rusia, incluyendo la promoción de un golpe de Estado en Kiev para preparar apoderados que intenten socavar a Moscú.

Occidente, que estaba perdiendo terreno militar, político y moral, e incluso su núcleo moral (véase el alejamiento del cristianismo en Europa Occidental), pasó al contraataque histérico. La guerra se hacía inevitable, la cuestión era dónde y cuándo.

El Covid se utilizó como sustituto durante dos años. Pero una vez diluido su efecto, era inevitable un choque aquí o allá. Al darse cuenta de ello, Rusia decidió atacar primero.

Esta operación tenía varios objetivos: impedir que Occidente creara una cabeza de puente militar ofensiva en las fronteras de Rusia, que estaba tomando forma rápidamente, y preparar al país para los efectos a largo plazo del conflicto y el cambio rápido. Esto requiere un modelo diferente de sociedad y economía: uno de movilización.

El siguiente objetivo es purgar a las élites de los elementos prooccidentales y "compradores".

Pero tal vez el principal impulso de la ofensiva desde la perspectiva de la historia mundial, no solo de la rusa, sea la lucha por la liberación definitiva del planeta del yugo occidental de 500 años, que ha suprimido países y civilizaciones y les ha impuesto condiciones desiguales de compromiso. Primero simplemente saqueándolos, a través del colonialismo, luego del neocolonialismo, y más tarde a través del imperialismo globalista de los últimos 30 años.

El conflicto de Ucrania, al igual que muchos acontecimientos de la última década, no solo tiene que ver con la ruptura del viejo mundo, sino también con la creación de un mundo nuevo, más libre, más justo, más pluralista, política y culturalmente y más multicolor.

El significado global de la lucha en Ucrania es la devolución de la libertad, la dignidad y la autonomía a los no occidentales (y proponemos llamarlos por otro nombre: la Mayoría Global, que antes fue reprimida, robada y humillada culturalmente). Y, por supuesto, un reparto justo de la riqueza mundial.

Rusia no puede dejar de ganar esta guerra, aunque será difícil. Muchos de nosotros no habíamos contado con una voluntad tan fuerte por parte de Occidente de luchar militarmente, y con una determinación tan grande por parte de algunos ucranianos -que se han transformado en la semejanza de los nazis alemanes previamente puestos en contra de Moscú- de luchar desesperadamente, y a su nivel de armamento. Probablemente, dadas las tendencias globales generales y el equilibrio de poder mundial, deberíamos haber golpeado antes. Pero no conozco el nivel de preparación de nuestras Fuerzas Armadas.

Creo que en 2014 deberíamos haber actuado definitivamente con más decisión, abandonando las esperanzas de un acuerdo.

Estamos viviendo un periodo peligroso, al borde de una tercera guerra mundial en toda regla que podría acabar con la existencia de la humanidad. Pero si Rusia gana, lo que es más que probable, y las hostilidades no se convierten en un conflicto nuclear en toda regla, no deberíamos considerar las próximas décadas como una época de peligroso caos (como dice la mayoría de Occidente). Llevamos mucho tiempo viviendo en este periodo.

Lo será, si optamos por un mundo de creación constructiva y por la consecución de la libertad, la justicia y la dignidad de los pueblos y las naciones.

El antiguo sistema de instituciones y regímenes ya se ha derrumbado (libertad de comercio y respeto a la propiedad privada). Mientras tanto, instituciones como la OMC, el Banco Mundial, el FMI, la OSCE y la UE están, me temo, llegando a sus últimos años.

Empiezan a surgir nuevos organismos a los que pertenece el futuro. Son la OCS, la ASEAN+, la Organización de la Unidad Africana y la Asociación Económica Integral Regional (RCEP). El Banco Asiático de Desarrollo ya presta muchas veces más que el Banco Mundial. No todas las nuevas instituciones sobrevivirán, y esperemos que varias de ellas lo hagan, especialmente en el sistema de la ONU, que necesita urgentemente una reforma para representar principalmente a la Mayoría Global en la secretaría, en lugar de a Occidente.

Lo principal es evitar que un Occidente perdedor estanque la historia o la haga descarrilar mediante una guerra mundial.

No solo los países de la Mayoría Global, sino también los países occidentales pueden vivir bastante felices en este mundo. Occidente simplemente perderá la oportunidad de saquear al resto del planeta y tendrá que reducirse un poco. Tendrán que vivir dentro de sus posibilidades.

Me temo que este nuevo mundo que está tomando forma ahora se creará más allá de mi vida intelectual o física. Pero mis jóvenes colegas y seguramente sus hijos lo verán.

Pero hay que luchar por esta hermosa visión, en primer lugar, impidiendo una tercera guerra mundial, por el intento de venganza de Occidente. De nuevo, fue en Europa donde se desencadenaron las dos primeras guerras mundiales. Rusia lucha ahora, entre otras cosas, para que no se den las condiciones necesarias para una tercera. Pero los conflictos se producirán en una época de rápidos cambios. Así que la lucha por la paz debería ser uno de los temas principales de nuestra comunidad intelectual y del mundo en general.

Traducción: Jorge Capelán.

sábado, 29 de octubre de 2022

(+VÍDEOS) Nicaragua: El 6 de noviembre el pueblo ratifica su democracia

Elecciones en Nicaragua hoy.

Por Jorge Capelán.

El próximo 6 de noviembre Nicaragua acude a las urnas por vigésima primera vez desde 1979. Nadie se molesta en contar las «elecciones» de Somoza porque todo el mundo sabe que fueron realizadas según el modelo de las tres «P»: PLATA para los amigos, PALO para los indecisos y PLOMO para los enemigos.

Por razones obvias, nadie tampoco se molesta en contar las «elecciones» organizadas por los marines yanquis, que hacían que contaban los votos y luego le daban el poder al pelele oligarca de turno.

La ocupación yanqui en Nicaragua.

Lo cierto es que la democracia en Nicaragua nació un 19 de julio de 1979, cuando el pueblo armado, insurreccionado y conducido por el Frente Sandinista, corrió del país tanto a Somoza como a los marines.

Cosa curiosa, en ese mismo momento los Estados Unidos y la oligarquía empezaron a decir que la democracia en Nicaragua estaba en peligro, pero la realidad es muy distinta: Hoy se puede decir que la democracia está asentada, no solo por las elecciones, sino por toda la manera como se diseñan los planes de Gobierno y las políticas públicas. Un dato no menor es que, por primera vez en la historia, se ha decidido que las mujeres deban tener al menos la mitad de las candidaturas y los puestos a todos los niveles.

¿Cómo Nicaragua logró reducir su brecha de género?

Esta será la sexta vez que se celebren elecciones exclusivamente municipales, porque en 1990 y 1996 las autoridades municipales fueron electas al mismo tiempo que las nacionales.

Además, esta será la cuarta vez que se realicen elecciones municipales desde que el Frente Sandinista regresó al poder en el año 2007 para continuar lo que quedó interrumpido tras la derrota electoral de 1990. Si la oposición al sandinismo es débil, no es culpa del Frente Sandinista, sino de que históricamente esta ha sido dependiente de la intervención extranjera.

Otro dato a tener en cuenta es que estas serán las segundas elecciones libres de la sopa de siglas de las ONG «pro-democracia» financiadas por Estados Unidos y Europa, diseñadas para que la gente vote por el candidato correcto en la mayoría de los países del mundo.

La Nicaragua de 2022 es muy distinta a la Nicaragua que había antes del año 2007. No vamos aquí a dar más detalles, quien sienta curiosidad por la amarga noche neoliberal puede ver el excelente vídeo del amigo y compañero Marcio Vargas, «Los 16 años que nos robaron»:

“Los 16 años que nos robaron”

Por aquellos días, cuando gobernaban los que los Estados Unidos llaman «demócratas», las elecciones se convirtieron en una verdadera y siniestra farsa, tal y como lo demuestra el fraude de 1996, que ninguna ONG estadounidense o europea condenó:

El fraude de 1996.

En fin, el domingo 6 de noviembre no habrá sorpresas: Una mayoría enorme irá a votar por el modelo que ha escogido, lo que digan en Washington y Bruselas es totalmente irrelevante.

Sandinistas listos, en Juigalpa, (Chontales) y en todos
los municipios de Nicaragua.

miércoles, 26 de octubre de 2022

Alertan al ALBA-TCP ante peligro de intervención militar estadounidense en Haití

 


Por Jorge Capelán.

Berthony Dupont, director de la organización Haití Liberté, con el respaldo de varias organizaciones antiimperialistas de Estados Unidos, envió una carta urgente al Secretario General del ALBA-TCP, Sacha Llorenti, advirtiendo sobre el serio peligro de una intervención militar estadounidense en Haití.

«Usted, como Secretario General del ALBA, está en una posición clave para advertir a las naciones miembros del CARICOM del peligro y las trampas de seguir el esfuerzo de los Estados Unidos», escribe Dupont.

Según el activista, los Estados Unidos, ante la probable negativa de China y Rusia a dar su visto bueno en el Consejo de Seguridad de la ONU y las dificultades para activar la cláusula de intervención militar de la “Carta Democrática” de la OEA, optarían por crear una fuerza de intervención con fachada “humanitaria” con países de la región.

«El plan ya ha avanzado, creando una situación grave. Estados Unidos ha convencido al Consejo de Seguridad de la ONU para que vuelva a poner a Haití bajo el control del Capítulo 7, despojándolo así de su soberanía. Además, al igual que Estados Unidos, el Consejo de Seguridad ha empezado a imponer sanciones a personas de Haití, como ha hecho Estados Unidos contra personas de Venezuela y Cuba», agrega Dupont.

«Esto es una grave violación de la soberanía de Haití y una amenaza para la soberanía de todos los países de la región», afirma el autor de la carta, que cuenta con el respado del Círculo Bolivariano de América del Norte, la Coalición Cuba Sí, el Consejo de Asuntos Hemisféricos (COHA), la Red de Solidaridad con Honduras, Solidaridad con Nicaragua, la Alianza por la Justicia Global (AFGJ), la Campaña de Eliminación de Sanciones, la Coalición Nacional Unida contra la Guerra (UNAC) y el Centro de Acción Internacional.

Texto completo de la nota:

Español:

25 de octubre de 2022

Sacha Llorenti
Secretario General del ALBA-TCP
Caracas, Venezuela

Estimado Secretario General Llorenti,

Le escribimos hoy para advertirle de una grave amenaza para la región del Caribe en general y para la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América - Tratado de Comercio de los Pueblos en particular.

Usted, como Secretario General del ALBA, está en una posición clave para advertir a las naciones miembros del CARICOM del peligro y las trampas de seguir el esfuerzo de los Estados Unidos.

Los Estados Unidos de América han iniciado una campaña para basar sus fuerzas armadas en Haití durante al menos una década, estableciendo así otro precedente para violar la soberanía de las naciones latinoamericanas y creando una posición de avanzada para la agresión contra los levantamientos populares regionales y las naciones miembros del ALBA, particularmente Cuba y Venezuela. Esta es la cuarta invasión de Washington a Haití en un siglo. Desde 1804, una excusa tras otra ha justificado décadas de sanciones estadounidenses a Haití.

Parece que China y Rusia bloquearán la táctica de Washington para obtener la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU para otra ocupación militar de Haití.  No es probable que Luis Almagro reúna los 23 votos necesarios para activar la cláusula de intervención militar de la "Carta Interamericana" de la OEA.

Sin embargo, es posible que EE.UU. intente formar una alianza caribeña similar a su táctica para proporcionar una hoja de parra para su invasión de Granada en 1983.

En la actualidad, Estados Unidos no tiene otra forma de introducir sus tropas en Haití, que es un caso piloto para la aplicación de la Ley de Fragilidad Global de Estados Unidos. Su objetivo es precisamente estacionar tropas estadounidenses en varios países de forma bilateral, todo ello bajo la apariencia de ayuda "humanitaria".

El plan ya ha avanzado, creando una situación grave. Estados Unidos ha convencido al Consejo de Seguridad de la ONU para que vuelva a poner a Haití bajo el control del Capítulo 7, despojándolo así de su soberanía. Además, al igual que Estados Unidos, el Consejo de Seguridad ha empezado a imponer sanciones a personas de Haití, como ha hecho Estados Unidos contra personas de Venezuela y Cuba.

Esto es una grave violación de la soberanía de Haití y una amenaza para la soberanía de todos los países de la región.

Este llamamiento cuenta con el apoyo del Círculo Bolivariano de América del Norte, la Coalición Cuba Sí, el Consejo de Asuntos Hemisféricos (COHA), la Red de Solidaridad con Honduras, Solidaridad con Nicaragua, la Alianza por la Justicia Global (AFGJ), la Campaña de Eliminación de Sanciones, la Coalición Nacional Unida contra la Guerra (UNAC) y el Centro de Acción Internacional.

Gracias por su atención a este asunto urgente.

Berthony Dupont
Director

English:

October 25, 2022

Sacha Llorenti
Secretary General of ALBA–TCP
Caracas, Venezuela

Dear Secretary General Llorenti,

We write you today to warn of a grave threat to the Caribbean region generally and the Bolivarian Alliance for the Peoples of Our America – Peoples' Trade Treaty in particular.

You, as ALBA’s Secretary General, are in a key position to warn CARICOM member nations of the peril and pitfalls of going along with the U.S. effort.

The United States of America has begun a campaign to base its armed forces in Haiti for at least a decade, thereby establishing yet another precedent for violating the sovereignty of Latin American nations and creating a forward position for aggression against regional popular uprisings and ALBA member nations, particularly Cuba and Venezuela. This is Washington’s fourth invasion of Haiti in a century. Since 1804, one excuse after another has justified decades of U.S sanctions on Haiti.

It appears that China and Russia will block Washington’s gambit to get UN Security Council approval for another military occupation of Haiti.  Luis Almagro is not likely to gather the 23 votes necessary to trigger the military intervention clause of the OAS’s “InterAmerican Charter.”

However, U.S. may try to form a Caribbean alliance similar to their tactic to provide a fig-leaf for its 1983 invasion of Grenada.

The U.S. currently has no other way to get its troops into Haiti, which is a pilot case for implementation of the U.S. Global Fragility Act. It aims precisely to station U.S. troops in various countries on a bilateral basis, all under the guise of “humanitarian” aid.

The plan has already made headway, creating a grave situation. The U.S. has convinced the UN Security Council to place Haiti once again under Chapter 7 control, hence stripping Haiti of its sovereignty. Furthermore, like the U.S., the Security Council has begun placing sanctions on individuals in Haiti, as the U.S. has done against individuals in Venezuela and Cuba.

This is a gross violation of Haiti’s sovereignty and a threat to the sovereignty of every country in the region.

This call has the support of Bolivarian Circle of North America, Cuba Si Coalition, Council of Hemispheric Affairs (COHA), Honduras Solidarity Network, Nicaragua Solidarity, Alliance for Global Justice (AFGJ), Sanctions Kill Campaign, United National Antiwar Coalition (UNAC), and the International Action Center.

Thank you for your attention to this urgent matter.

Berthony Dupont
Director


lunes, 24 de octubre de 2022

Nicaragua en América Latina - lo invisible y la realidad


El tratamiento del cáncer en Nicaragua
cuenta ahora con dos aceleradoras lineales

Por Stephen Sefton

En Nicaragua la población vive la realidad del desarrollo revolucionaria del país , de la democratización de la economía, de la modernización de los sistemas de salud y de educación, de la transformación de infraestructura y una dinámica reafirmación de la cultura, la identidad y la dignidad nacional. Sin embargo, en el exterior y en la misma región, estas tremendas victorias socio-económicas son prácticamente invisibles en los medios de información. Puede ser instructivo mirar esta realidad de manera detenida.

En una reciente entrevista, el compañero Ministro Iván Acosta observó que Nicaragua “es uno de los Países que más creció, crecimos en los años de la pandemia 8.3% combinado, que es el mayor crecimiento de Centroamérica, uno de los mayores de todo Latinoamérica y probablemente internacionalmente.” Los datos citados por el Ministro son avalados por las instituciones financieras internacionales. De igual manera, tanto el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional como el Banco Centroamericano de Integración Económica confirman que Nicaragua es entre los mejores países en términos de la ejecución de sus respectivas carteras de préstamos. Ahora también, el Grupo de Acción Financiera ha valorado a Nicaragua como un país libre del lavado de dinero.

Un estudio en mayo de 2021 por la Organización Mundial de Salud y la Universidad de Oxford incluyo a Nicaragua entre los diez países más seguros para viajeros en relación al Covid-19. Nicaragua fue el único país latinoamericano en la lista. Nicaragua tiene el más extenso y mejor equipado sistema de salud pública en América Central. Se espera terminar la construcción de otros seis importantes hospitales más en los próximos meses. Nicaragua acaba de inaugurar la primera planta de oxígeno medicinal en Centroamérica. El Centro Diagnóstico de Referencia Nacional es uno de los laboratorios pioneros de la biología molecular en América Latina, segundo en la región. En Nicaragua la atención de salud pública es gratis.

También es gratis la educación en el sistema público desde preescolar y primaria hasta secundaria, igual que la educación vocacional ofrecida en la extensa red nacional de colegios del Instituto Nacional Tecnológico. Las universidades públicas garantizan acceso equitativo a la educación superior para todas y todos los estudiantes bachilleres. Cada año se entrega más de un millón de paquetes escolares para estudiantes en todo el país. Se distribuye alimentos para garantizar una merienda escolar diario a más de 1.2 millones de estudiantes, en un país con una población de 6.5 millones.

Nicaragua es entre los primeros países en el mundo en la igualdad de género. Es entre los primeros países con mayor seguridad ciudadana en América Latina y el Caribe. Tiene la mejor red de carreteras en América Central. Alrededor de dos millones de familias son más seguras jurídicamente por haber recibido el título de su propiedad de parte del gobierno. El país genera 70% de su energía eléctrica de fuentes renovables con una cobertura del sistema eléctrica mayor de 99% a nivel nacional. El gobierno mantiene subsidios al precio de petróleo y sus derivados, al transporte público terrestre y acuático y a la energía eléctrica.

Nicaragua tiene el sistema de Autonomía de los Pueblos Indígenas más avanzada y democrática en América Latina con más de 30% del territorio nacional titulado a nombre de 23 comunidades indígenas y afrodescendientes. Es un país prácticamente auto-suficiente en la producción de alimentos. Sus iniciativas de seguridad alimentaria incluyen programas como el Bono Productivo y el programa solidario CRISSOL de granos básicos, los cuales se protagonizan por más de 200,000 productores. Con el programa de crédito para mujeres, Usura Cero, más de 115,000 mujeres al año mejoran el nivel de vida de sus familias.

Uno podría pensar que este tremendo éxito social y económico del Pueblo Presidente de la Revolución Sandinista en Nicaragua sería de mucho interés y admiración general a nivel regional y continental. Pero no es así. Por supuesto, dentro de Nicaragua, todas estas victorias socio-económicas se conocen y se viven día a día por la población. También las victorias del Pueblo Presidente en Nicaragua son reconocidas, aunque generalmente con un bajo perfil, por las respectivas instituciones correspondientes internacionales, como la Organización Mundial de Salud, la Organización de Alimentos y Agricultura (FAO), UNICEF y UNESCO entre otras.

La clave es que, para alcanzar estas victorias, Nicaragua ha superado siglos de opresión colonial. Luego, después del triunfo de la Revolución Popular Sandinista en 1979, se desató una interminable campaña de hostigamiento y agresión de parte de Estados Unidos y sus aliados. De allí viene la campaña sistemática comunicacional e institucional para denigrar, menospreciar, socavar y ningunear el incuestionable, destacado éxito de las políticas del gobierno del Presidente Comandante Daniel Ortega y Vice Presidenta Rosario Murillo.

Se trata de una maquinaria de guerra psicológica no solamente de los medios de comunicación regionales e internacionales. También se trata de una ofensiva de propaganda difundida por la proliferación de ONGs, por la industria académica de ciencias sociales, y por las instituciones como la OEA o la Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la ONU, y varias instancias de la Unión Europea. Todas estas instancias han abandonado las normas más básicas del reportaje de buena fe.

El reportaje genuino se basa en el testimonio de buena fe de primera mano, el uso documentación y datos confiables, un proceso de corroboración adecuada, reconocimiento de narrativas contrarias y un esfuerzo constante de permitir a las y los lectores de decidir por si mismos. En el caso de Nicaragua, igual que con Cuba y Venezuela, estas normas se han sustituido por una despiadada campaña de mentiras, de omisiones, de arbitrariedades, de permanente sesgo y abierta manipulación. Quizás el caso más emblemático de este abandono de la buena fe de parte de parte de casi todas las fuentes de información en América Latina, entre muchísimos otros, fue el inicio del fallido golpe de estado en Nicaragua en abril 2018.

En Nicaragua, todas y todos recordamos que el pretexto inicial de las violentas protestas fue la reforma de la Ley de Seguridad Social, la cual fue distorsionado y tergiversado de tal manera que la gran mayoría de la gente terminaron creyendo el absurdo de que la empresa privada quería defender los derechos de los pensionados y de las y los obreros. De hecho, el Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) quería subir la edad de jubilación de 60 a 65, eliminar la pensión mínima y la pensión reducida, el bono navideño y el mantenimiento del valor de las pensiones. Querían doblar el número de cuotas para poder recibir una pensión de 750 a 1500 y propusieron la privatización de las clínicas del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS).

Las fuentes de información regional e internacional suprimió por completo esta realidad y mintieron sobre las propuestas del gobierno, las cuales en verdad fueron: un aumento gradual en el aporte del empleador de 3.25% y de los trabajadores de 0.75%; que personas con salarios altos paguen un cuota proporcional a sus ingresos; aumentar el aporte del gobierno para el sector público en 1.25%; mantener el numero de cuotas semanales para una pensión en 750; mantener la pensión reducida y la pensión mínima; mantener el bono navideño y el mantenimiento del valor; garantizar la atención médica completa del INSS para las personas jubiladas en cambio de una cuota de 5% de su pensión; y no privatizar las clínicas del INSS.

Sin embargo, si uno lee prácticamente cualquier artículo periodístico o académico o incluso las cínicas resúmenes falsas de la OEA, de la ONU o de la Unión Europea, todos alegan que fue el ataque del gobierno de Nicaragua a los derechos de los contribuyentes al INSS que provocó las protestas en abril 2018. Esto sigue siendo la narrativa dominante que prevalece en casi todo el material que uno encuentra sobre el fallido golpe de estado de 2018 en Nicaragua. De hecho, lo que provocó las protestas fue una campaña por un cambio de régimen promovido, financiado y dirigido por Estados Unidos y sus aliados europeos. En ese momento en 2018, el único medio que buscaba la verdad fue Telesur, gracias a la iniciativa de su director Patricia Villegas quien consultó con medios sandinistas para saber la verdad.

Por lo demás, casi todos los otros medios a nivel latinoamericano, de todo el espectro ideológico, tragaron la estúpida mentira que la empresa privada y las ONGs financiadas por Estados Unidos querían defender el INSS en Nicaragua a favor de la clase obrera y las y los pensionados. Esto es solamente un ejemplo entre los más claros del fenómeno del abandono al por mayor de las normas básicas de reportaje por la gran mayoría de las fuentes de información en America Latina en relación a Nicaragua. La palabra “patético” ni se acerca a describir este colapso de la integridad moral e intelectual a nivel continental.

De la misma manera la gran mayoría de las fuentes de información en la región y a nivel internacional hablan de “presos políticos” para referir a personas en Nicaragua que recibieron dinero directa o indirectamente de varios gobiernos extranjeros y cometieron entre otros delitos los crímenes de: apropiación y retención indebida; lavado de dinero, bienes y activos; gestión abusiva y falsedad ideológica. Todos son delitos penados por el Codigo Penal que data de 2007 cuando fue aprobado por una legislativa controlado por los partidos de derecha. Además, casi todas estas personas gestionaron en el extranjero a favor de medidas coercitivas ilegales de parte de poderes extranjeros en contra su propio país, un delito de traición criminal penado en prácticamente todos los países del mundo.

Aquí en Nicaragua, tenemos en los medios sandinistas verdaderos reporteros genuinos de primera línea. Pero se encuentran excluidos como fuentes de información a nivel latinoamericano e internacional con el pretexto de que son medios afines al gobierno. Como si el periodismo perezoso, deshonesto e incompetente que prevalece en la región no está comprado por los respectivos intereses corporativos y gubernamentales, igual que el complejo industrial de las ONGs o la industria académica de las ciencias sociales, compradas y acomodadas en la red de desinformación manipulada por las empresas e instituciones corruptas que predominan en la región y que responden a los intereses de sus amos occidentales.

La gran mayoría de las fuentes de información en la región no investigan nada de buena fe, sino que buscan lo que prefieren encontrar. En efecto son meramente unos despreciables actores más en la guerra psicológica occidental reciclado por medio de un bucle de retroalimentación infinita lo cual ellos también alimentan con sus falsos reportajes. Estas son las principales fuentes de la producción y distribución de información en América Latina y el Caribe y, por cierto, en el Occidente en general. En el caso de Nicaragua, ocupan fuentes casi completamente financiadas por los gobiernos estadounidenses y europeos y tienen el descaro de llamarlas independientes.

Entonces, Nicaragua enfrenta un sistema diseñado a hacer invisibles las victorias de la Revolución Popular Sandinista, y en la medida posible menospreciar también los logros de la Revolución Bolivariana en Venezuela y de la Revolución Cubana. Sin embargo, aunque sea tarde, la realidad se impone porque la verdad sigue existiendo detrás de la fantasmagoría virtual creado por las falsas fuentes de información. Así que, en la misma medida que la democracia radical de la Revolución Cubana y de la Revolución Bolivariana en Venezuela van derrotando el bloqueo económico, psicológico y político del Occidente y sus peones locales, también la revolución del Pueblo Presidente en Nicaragua lo hará.

domingo, 23 de octubre de 2022

Izquierda Visión: Ucrania y otros temas

Jorge Capelán y Marcio Vargas hablan sobre la guerra de Ucrania y otros temas en el espacio Punto de Vista, del programa Izquierda Visión de Canal 4.

jueves, 20 de octubre de 2022

Oportunidades al mundo:Modernización al estilo chino

 


Por Gao Xue, Corresponsal de CMG en América Latina.

En la sesión inaugural del XX Congreso Nacional del PCCh, Xi Jinping presentó un informe en el que enfatizó que la tarea central del PCCh es unir y conducir al pueblo de las diversas etnias del país en la materialización del objetivo de lucha fijado para el segundo centenario -la culminación de la construcción integral de un poderoso país socialista moderno-, promoviendo integralmente la gran revitalización de la nación china con la modernización china.

¿Qué significa la modernización allí mencionada, para China y el mundo?

La modernización de China se fundamenta sobre el desarrollo en interés de su pueblo, de ahí el gran apoyo del pueblo chino a las iniciativas del Partido Comunista de China (PCCh) en su liderazgo. China erradicó la pobreza extrema y culminó la construcción de una sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos, para completar así el Primer Objetivo Centenario.

Denis Moncada, Ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua le dijo al Grupo de Medios de China: “Durante la última década, el proceso de la erradicación de la pobreza en China es impresionante. Además, que China se ha convertido en una potencia en materia de innovación tecnológica y un actor clave en la cooperación internacional a través de iniciativas como La Franja y la Ruta que aporta a la conectividad y a potenciar el comercio.”

De acuerdo con su disposición estratégica general de dos fases, el PCCh guiará a China para el «cumplimiento básico de la modernización socialista de 2020 a 2035» y «la transformación de nuestro país en un poderoso país socialista moderno, próspero, democrático, civilizado, armonioso y bello de 2035 a mediados de siglo».

En entrevista con el Grupo de Medios de China, Lina Luna, Profesora de la Universidad del Externado de Colombia, dice que “China está lista para llevar la modernización del país a un nuevo nivel, donde el bienestar de la población, la disminución de las desigualdades, la oferta de mayores oportunidades laborales para aquellos de menores ingresos, el fortalecimiento del sistema de salud sobre la base de la sabiduría de la medicina tradicional china para consolidar un país saludable, son algunos de los lineamientos de las políticas públicas de los próximos años.”

El esfuerzo de modernización de China pasó a primer plano en un momento en el que profundos cambios no vistos en un siglo están transformando al mundo, el cual una vez más ha llegado a una encrucijada en la historia.

El desarrollo de China también está en línea con el interés del mundo, según afirmó el analista nicaragüense, Jorge Capelán: “China no solamente se concentra en sí misma, tiene claras sus prioridades pero sabemos que es parte de un mundo que tiene que tener un alto nivel de estabilidad en el futuro. El PCCh está comprometido en promover la paz, la cooperación, el respeto mutuo y el desarrollo para un futuro compartido.”

Estamos en un momento donde el desarrollo es importante a través del comercio global y de la integración. Expertos afirman que la modernización de China impulsará en mayor medida el comercio internacional.

Desde 2013, con el avance de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, han aumentado las esperanzas y las expectativas de los pueblos de América Latina en cuanto a poder desarrollarse. En la actualidad, 21 países de América Latina se han unido al círculo de amigos de “la Franja y la Ruta” hasta 2022.

El valor total del comercio entre China y América Latina y el Caribe registró un nuevo récord en 2021, con 451.591 millones de dólares, lo que supuso un aumento del 41,1 por ciento respecto al año anterior, pese a la incertidumbre en la economía mundial y las vicisitudes causadas por la pandemia de la COVID-19, según datos publicados por la Administración General de Aduanas de China en enero pasado.

Después del brote de COVID-19, China y América Latina se han ayudado mutuamente y han superado las dificultades juntos, convirtiéndose en un modelo para que países de diferentes escalas y condiciones nacionales cooperen en la lucha contra la pandemia.

Para Jhon Beens, Profesor de la Universidad Central de Venezuela (UCV), la nación asiática no sólo se ha centrado en atender los asuntos de beneficio propio, sino que se ha encargado de impulsar el crecimiento de otros países en vía de desarrollo, por lo que su papel en el plano internacional se ha vuelto cada vez más preponderante.

domingo, 16 de octubre de 2022

Chile: Sin izquierda no hay paraíso

 


Por Teófilo Briceño. Centro de Estudios Francisco Bilbao.

Hay un vacío gigantesco, no hay un espacio, una referencia política a la izquierda del actual gobierno.

El sistema y sus medios de comunicación, a los cuales se suman los bots y seres humanos que actúan como bots, definen a la actual administración como un gobierno de izquierda, y hasta un reconocido intelectual del continente como Atilio Borón, antes de que Gabriel Boric asumiera, insinuó que era un nuevo Allende, aunque luego recogió cañuela.

Es indesmentible que en la coalición del gobierno hay fuerzas políticas, como el Partido Comunista, que están en la tradición de la izquierda chilena, pero eso no implica necesariamente que el gobierno lo sea. Es más, las actuaciones de la coalición que ocupa transitoriamente La Moneda, en la práctica son muy similares a las de los gobiernos pasados de la Concertación, la Nueva Mayoría y la propia derecha.

Pero más allá de la polémica, del uso o abuso de categorías como izquierda, centro y derecha, para definir el actual cuadro político, sí son categorías que en los sentidos comunes que circulan en Chile tienen todavía validez.

Constatamos que hoy se habla de “las izquierdas” para acentuar la diversidad de pensamientos, e incluso de intereses en aquellos que se asumen y reconocen en este espectro político. También constatamos que cada vez es más difuso asimilar la definición con la pertenencia a una clase o sector social, a la par de la existencia de una inmensa mayoría a la que no le interesan están definiciones, y que fantasiosa, o incluso ingenuamente, se autodefine como “apolítica”.

Pero la pregunta cae de cajón, ¿qué es ser de izquierda? Y asumiendo que es una categoría de uso político y no una categoría de clase en un análisis marxista, y menos de estratificación social en las definiciones de las ciencias sociales gringas.

En palabras más simples, pertenecer al proletariado no te define como de izquierda, ser pobre o precario tampoco. Lo que nos lleva a definiciones asociadas a cierta visión de cómo debe ser la sociedad, la VISIÓN DE PAÍS como les gusta hablar a los académicos y políticos “progresistas”.

Está claro que la “visión de país” que tenía el proyecto de la Unidad Popular, que buscaba terminar con el capitalismo y construir una sociedad de orientación socialista con un norte post capitalista, no tiene nada que ver con la visión de país que tuvo o tiene Bachelet, y ahora Boric Font. Ellos, qué duda cabe, sólo quieren humanizar el neoliberalismo, en absoluto terminarlo.

Por sus obras los conoceréis dice un refrán popular. Y al gobierno de la Unidad Popular se le pueden hacer múltiples críticas, pero tenía un proyecto, un horizonte claro, un programa de gobierno, no sólo de derechos sociales avanzado para su época, también un programa económico que apuntaba a la soberanía nacional y popular, un programa que tenía en su contenido central, no sólo que mandara el pueblo o los pueblos, sino también de desmantelar el poder de la oligarquía, de las transnacionales y del Estado portaliano. De eso, no hay absolutamente nada en el actual gobierno.

Pero para retomar ese proyecto nacional popular, revolucionario, retomar, significa también actualizarlo a un mundo que está en constante transformación, pero también en peligro de extinción, y por ello se necesita una fuerza unitaria o una referencia a la izquierda de este gobierno, claramente mediocre y entreguista.

Es una necesidad urgente, prioritaria, porque sin alternativa, sin fuerza político social, sin proyecto no habrá justicia social ni dignidad.

Hay que caminar hacia la conquista de un nuevo gobierno popular, que esta vez tenga las capacidades incluso de enfrentar una hipotética guerra civil, en ello, en su diversidad, tiene que existir una izquierda popular que sea el germen para aquello.

Sin izquierda, pero una verdadera izquierda, qué duda cabe, no hay paraíso.

sábado, 15 de octubre de 2022

XX Congreso del PCCh: Un hito de la naciente multipolaridad

Exposición "Avanzando en la nueva era",
parte de los preparativos del Congreso.
(Foto: Global Times)


 

Por Jorge Capelán.

Un evento de máxima relevancia para el surgimiento del nuevo orden multipolar es el XX Congreso del Partido Comunista de China, que arranca este fin de semana en Beijing.

En este congreso, que se celebra cada cinco años, y esta vez reunirá a 2.296 delegados electos, se ratificará la línea general de desarrollo del modelo de socialismo con características propias de la gran nación asiática, lo que a su vez tendrá una gran influencia sobre el tipo de orden multipolar que surgirá de la debacle de Occidente en curso.

La actual crisis civilizatoria por la que atraviesa la humanidad es la crisis de un modelo occidental de desarrollo centrado en la las finanzas, la deuda, la conquista militar de los mercados a escala planetaria y la explotación inmisericorde de la Madre Tierra. Ese modelo está de salida de la historia y no será reeditado por los polos que surjan de la caída de Occidente.

En el neoliberalismo occidental son los intereses financieros los que predominan sobre la política. En el nuevo orden venidero, la política necesariamente deberá dominar a las finanzas, tal y como ocurre en la China socialista. El mundo se enfrentará a una serie de realidades insoslayables de la mano de la crisis ecológica global, e independientemente de sus ideas, todos los gobiernos del planeta deberán buscar soluciones a los acuciantes retos que enfrenta la humanidad.

En este sentido, el ejemplo de China, con su modelo basado en satisfacer las necesidades básicas del pueblo con el objetivo de alcanzar un nivel razonable de bienestar y la búsqueda de acuerdos económicos de beneficio mutuo con los demás países, será un factor de estabilidad y seguridad a largo plazo para el mundo.

El concepto chino de construir una comunidad de futuro compartido de la humanidad es una prueba de este compromiso de la nación asiática.

Según el comunicado emitido el miércoles por el Comité Central del Partido tras la sesión previa al Congreso, existe un "acuerdo unánime" acerca de la necesidad de seguir en la línea del desarrollo del socialismo con características chinas trazada por su secretario general, Xi Jinpin para "la construcción integral de un país socialista moderno".

En este sentido, es claro que el liderazgo de Xi adquiere dimensiones históricas, al lado de figuras como la de Mao Zedong y Deng Xiaoping.

jueves, 13 de octubre de 2022

No se puede ser antirracista y apoyar al fascismo imperial

Resultados de la votación en la ONU
el 12 de octubre de 2022.

Por Jorge Capelán.

El 12 de octubre (fecha aciaga si las hay) de 2022 fue el día de la genuflexión planetaria de los gobiernos del Sur Global ante el ya decrépito orden imperial occidental que se cae a pedazos a 530 años de su colonización del mundo.

Me van a disculpar, pero otra vez disiento sobre Colombia. No me convence la definición de la vicepresidenta Francia Márquez con motivo del 12 de octubre. Suena bien, pero se queda corta, muy, pero muy corta. Márquez llama a "resignificar con dignidad nuestra identidad étnica y multicultural", agregando que "este no es el día de la raza, es el día de la diversidad étnica y cultural" finalizando con un llamado a "descolonizar nuestro pensamiento y nuestro accionar".

Precisamente, de pensamiento y de accionar se trata, no de formulaciones abstractas ni de plumajes multicultis. En estos momentos en el Abya Yala -incluso en Colombia- los pueblos luchan por la tierra, por los territorios, por una agricultura y un modelo de desarrollo material, moral y espiritual que satisfagan las necesidades de la gente y de la Madre Tierra, por un Buen Vivir para todos y todas.

Definitivamente, los pueblos no están luchando para permitir que se planten las botas de los marines yanquis en la Amazonía, que fue la propuesta del presidente Gustavo Petro le hizo recientemente a la jefa del Comando Sur de los Estados Unidos.

Y tampoco están luchando por montar un pogromo universal contra los pueblos eslavos, como lo fue la votación en la ONU, el propio 12 de octubre, condenando la incorporación a Rusia de territorios que le pertenecen desde hace cientos de años y cuyas poblaciones por mayoría aplastante exigieron. Tristemente, en esa votación, el gobierno de Francia Márquez se sumó al acto ritual de genuflexión ante las presiones occidentales de tantos gobiernos del Sur Global.

En ese sentido, hay que decir que aunque el voto por el "sí" imperial representó la mayoría de los Estados de la ONU, en términos de población solo fue el del 41% de los habitantes del planeta. La gran mayoría de la población mundial, entre ella la de países como la India y la China, se negaron a apoyar semejante chantaje.

No se puede ser antirracista y apoyar al fascismo imperial de los ucronazis de Kiev, criminales herederos de Hitler. No se puede ser antirracista y apoyar a la OTAN ni implorar botas estadounidenses en la tierra sagrada del Abya Yala.

miércoles, 12 de octubre de 2022

Resistencia de Úteros, valentía de mujeres indígenas

 


Por Enrique Beteta Acevedo.

Nuestra Patria la Nicaragua Bendita y libre fue vista por los españoles en 1502 por primera vez se habla de un español que venía a cargo de esas embarcaciones que se hacía llamar Cristóbal Colón, siendo su cuarto viaje por estos rumbos, al llegar  cerca de nuestras aguas se vio complicado su trajín, cuando dobló un accidente geográfico ubicado en el extremo oriental del río Coco, sus tripulantes pensaron que hasta ahí llegarían por lo violento de las olas, pero al entrar a ese espacio las aguas se calmaron y es así que bautizó con el nombre de Cabo Gracias a Dios por haber pasado la tormenta que amenazó con sus vidas.

Los historiadores afirman que la población de este país al llegar los primeros conquistadores españoles era cercana al millón de habitantes y 60 años después, había quedado reducida a cerca de 10 mil indígenas.

Nuestros indígenas acostumbrados a la vida colectiva, a rendirle honores a la naturaleza, amar el sol, adorar la luna, cantarle al viento con gritos y danzas, respetar las estrellas, los árboles, los ríos, enamorados de su fauna libre, desconocían la suerte que les esperaba con los conquistadores españoles que llegaron con la fineza intención de robar todas las riquezas y someter a nuestros antepasados a punta de la Cruz y la espada.

Nuestros aborígenes, en especial las mujeres, no avizoraban la tragedia que se les avecinaba ni el exterminio a que serían sometidas, no había ni señal del futuro aterrador, la destrucción que estaban por vivir en manos de los conquistadores.

Al desatarse la cacería desigual contra nuestros indígenas y aborígenes, la matanza, la esclavitud, el sometimiento, las torturas de los montados en esas bestias, disparando fuego con espejos en sus sombreros, llego el momento de resistir de todas las formas y de todas las tribus existentes en nuestro territorio.

En 1528 unos 18 caciques se rebelaron contra el déspota gobernador y éste los mandó a capturar.

En un cruel e inhumano espectáculo los hizo devorar por perros hambrientos, trascendiendo como uno de los episodios más trágicos de la conquista en este país.

Ante toda esa tragedia nuestras aborígenes iniciaron una protesta, en un momento de la etapa colonial, las nativas, sencillamente, se negaron a parir para evitar con ello que los colonialistas obtuvieran más esclavos.

Llama la atención esta primera huelga de úteros del mundo, que promovieron las mujeres indígenas nicaragüenses en una protesta sin precedentes contra la esclavitud de que eran víctimas, durante el mandato de Pedrarias Dávila (1527-1531).

Cuántas féminas se sumaron a esta huelga de úteros y en qué fecha exacta lo hicieron, son interrogantes para las cuales carecemos de respuestas, al menos por el momento, pero era necesario recordar el hecho, dormido entre papeles por demasiado tiempo, pero con una importancia histórica que debemos de rescatar y dar a conocer.

Un hecho así, que enaltece el amor patrio, la dignidad humana y la virtud, vale la pena recordarlo todos los días, por importancia histórica y resaltar lo digno de la lucha de nuestro pueblo, merece que lo recordemos y demos a conocer siempre.

Por su parte, Dávila Bolaños documenta su teoría con el testimonio del cronista Francisco López de Gómara: ‘No dormían (los indios) con sus mujeres para que no parieran esclavos de españoles. Como en dos años no nacían niños, y Pedrarias les prometió buen trato, y sí parían no los mataban’.

Singular protesta, posiblemente la única en su género referida por los historiadores, que demuestra el temple de las indígenas nicaragüenses, compañeras de valientes hombres, que prefirieron renunciar al placer inmenso de ser madres antes de ver subyugados al fruto de sus vientres, antes de ver que sus hijos se convirtieran en esclavos del invasor colonialista y conquistador español.

Aunque con muy pocos datos sobre el interesante tema, nos adentramos en él convencidos de su importancia histórica, de su papel en su época, como lo fueron otras formas de enfrentar la presencia extranjera, a través de levantamientos, batallas, luchas, por ejemplo.

La inusual huelga de úteros, posiblemente la única en América, protagonizada por las indígenas en Nicaragua, la sitúa el reconocido investigador, ya fallecido, Alejandro Dávila Bolaños como la primera oposición al dominio colonialista español.

Las mujeres indígenas tuvieron la valentía de protestar frente a la esclavitud con una excepcional: la negativa a reproducirse.

Esa fuerza presente desde nuestros ancestros indígenas vive en nuestra lucha diaria, el mismo espíritu combativo de Diriángen, es la misma fuerza de los indios que ante el filibusterismo juró sacar del país a los gringos que se querían adueñar de nuestras tierras, dando la lucha para expulsarlos, los mismos indios flecheros que lucharon en la Hacienda San Jacinto que cuentan los narradores de esas crónicas que practicaban con mazorcas de maíz al aire para desgranarlas a punta de flechas y al caer al suelo no llevaba ningún grano esa mazorca de la habilidad con la puntería, el espíritu de José Dolores Estrada, Andrés Castro, Sandino, Carlos Fonseca y Rigoberto espíritu que nos lleva a no vendernos ni rendirnos ante nadie.

Enrique Beteta Acevedo
11 octubre 2022
En La tierra libre de Sandino
Día de la Resistencia Indígena, Negra y Popular

martes, 11 de octubre de 2022

(VÍDEO) La guerra de Ucrania entra en una nueva fase y otros temas

 

El Néstor Espinosa del canal ExtraPlus y Jorge Capelán conversan sobre temas de actualidad:

1) Primeras impresiones tras el paso del huracán Julia (Tiempo: 00:00)
2) El ataque terrorista de Kiev al puente de Crimea y los bombardeos de Rusia en toda Ucrania (Tiempo: 9:27)
3) El reto civilizatorio de nuestros pueblos en el nuevo mundo multipolar. (Tiempo: 40:08)

sábado, 8 de octubre de 2022

Zelenski, el juglar atómico

 

Por Jorge Capelán.

Las recientes idas y venidas en torno a las declaraciones del «presidente» ucraniano Volodímir Zelenski sobre la necesidad de «ataques preventivos» para «eliminar la posibilidad de que Rusia haga uso de armas nucleares» son una prueba más de que el «mandatario» no es más que un simple actor y una marioneta al servicio de la OTAN, sin ninguna capacidad de análisis propio.

"Vuelvo a hacer un llamamiento a la comunidad internacional, como antes del 24 de febrero: ataques preventivos para que ellos [los rusos] sepan lo que les ocurrirá si lo utilizan, y no al revés", dijo el jueves Zelenski en una conferencia virtual con el Instituto Lowy de Australia.

Las declaraciones del «mandatario», que de inmediato desataron una ola de condenas dentro y fuera de Rusia, fueron retractadas horas más tarde en Facebook por el propio secretario de prensa de Zelenski, Serguéi Nikoforov.

Nikoforov señaló que, antes de que comenzaran las hostilidades, «las únicas medidas de las que hablamos fueron las sanciones preventivas».

Como si esa retractación no fuera suficiente, el día viernes la BBC de Londres publicó una aclaración del propio Zelenski en el sentido de que él estaba hablando de «patadas» y no de «ataques» preventivos, por lo que en realidad habría hecho referencia a sanciones.

Según RT, la palabra ucraniana udary empleada por Zelenski, literalmente se traduce igualmente como patada y como golpe. Pero lo que es difícil de entender, es cómo udary puede traducirse con la palabra sanciones.

Si Zelenski hubiera utilizado la cabeza, hubiera dicho «sanciones» y no «patada» o «golpe», pero a todas luces no estaba haciendo uso del raciocinio en esas declaraciones. Habló con el hígado sin darse cuenta de que estaba poniendo al mundo al borde de una guerra nuclear, algo que ni siquiera sus ventrílocuos imperiales de la OTAN desean.

No es que la OTAN tenga muchos remilgos a la hora de andar jugando con fuego, pero obviamente conocen las consecuencias de una guerra termonuclear contra una nación como Rusia y, sobre todo, saben que semejantes declaraciones de la «pobrecita víctima» de Zelenski no harían otra cosa que despertar toneladas de resquemores y objeciones en todo el mundo.

Esta no es la primera vez que las declaraciones de Zelenski despiertan miradas de asombro y obligan a los dispositivos mediáticos de la OTAN a movilizar a sus cuerpos de bomberos propagandísticos.

Entre las infelices declaraciones del «mandatario» se pueden recordar su defensa de que los neonazis incorporados a las filas del ejército ucraniano «son lo que son»; su afirmación de que su país recuperaría Crimea «por cualquier medio (...) sin consultar con ningún otro país del mundo» (cuando se conoce muy bien la total dependencia de Ucrania del dinero y las armas estadounidenses) y su petición del ingreso «acelerado» de su país a la OTAN (cosa imposible, ya que la alianza atlántica, al menos en teoría, no puede aceptar como miembros a países en guerra).

Si Zelenski no se dio cuenta de las graves implicaciones de sus palabras, esto quiere decir que está por debajo del promedio que sería de esperar de un político de su nivel. Es más, sería una prueba más para aquellos que consideran que no es más que un actor del montón reclutado por la CIA para hacer de peón tras una revolución de colores de Occidente, un caso más de un muñeco que asume su papel con más empeño de lo que desea el ventrílocuo que lo maneja.


El nazi-fascismo solo estaba dormido

Batallón neonazi Azov, Ucrania.
Foto: RT.


 

 

Por Miguel Necoechea

I

Mientras los pueblos de Europa y Estados Unidos enfrentan un alza, sin precedentes en los últimos treinta años, de los precios de la energía y alimentos y asediados por una inflación que no cede, sino que, por el contrario, crece, los pueblos de las llamadas naciones “occidentales” (nosotros estamos en Occidente y condenamos la agresividad y deseos de conquista de Estados Unido y la OTAN) destinan miles de millones de dólares, que bien podrían utilizar en sus países para arrancar de la pobreza a millones de sus ciudadanos y frenar la crisis económica mundial que, dicho sea de paso ellos han provocado, para financiar la guerra de conquista provocada por la OTAN y EE.UU., con Ucrania como punta de lanza, cuyo fin último es desestabilizar y fraccionar en pequeñas repúblicas a la Federación Rusa con el propósito de colonizarlas y explotar sus cuantiosos recursos naturales y, a aplicar “una solución final” en el mejor estilo nazi, borrando de la faz de la tierra a los seres humanos de origen eslavo, según han dicho públicamente los propios ucranianos. Como botón de muestra de lo anterior está la evidencia que Joe Biden ha pedido al Congreso de su país la friolera de ¡857.6 mil millones de dólares! para gastos militares.

Para la Federación Rusa las pretensiones de EE.UU. y la OTAN y la desnaturalizada Ucrania nazi, lo anterior no es noticia. Los rusos lo saben desde siempre. En la historia reciente, la Alemania de Hitler se quiso hacer con el territorio de la Unión Soviética durante la Segunda Guerra Mundial. Al final de ésta, EE.UU. y Europa occidental intentaron lo mismo a lo largo de la llamada Guerra Fría; en 1991 aprovechando el doloroso colapso de la Unión Soviética, faltaron a su palabra y descaradamente alinearon en la OTAN a las ex repúblicas socialistas con el propósito de militarizarlas. Esos países, en los que el nazismo solo dormía. Ucrania, Polonia, Hungría, Checoeslovaquia, Rumanía, Bulgaria, Lituania, Letonia y Estonia- están, armados con material bélico de EE.UU., Inglaterra, Francia y recientemente Alemania a las puertas de la frontera con Rusia.

Aunque es algo conocido, es importante remarcar que el cerco sobre Rusia dio un salto cualitativo con la toma de Ucrania por Estados Unidos en 2014. El golpe de Estado contra el presidente legítimo Víctor Yanukovich se dio un día después que él aceptara adelantar las elecciones presidenciales, tal como lo había acordado con los líderes europeos. Los medios de comunicación occidentales trataron de manipular a la opinión pública mundial pregonando que el presidente había caído a resultas de una sublevación popular. Poco después del 14 de febrero los medios de comunicación independientes, reportaron que la insurrección fue financiada e inducida con el beneplácito de Barak Obama y Joe Biden, su vicepresidente, e instrumentada por la subsecretaria de Estado Victoria Nuland - de espíritu nazi-fascista- quién se jactó de haber invertido 5 mil millones de dólares para que Ucrania se incorporará a la Unión Europea. El verdadero propósito de esta señora era que ingresará como miembro de pleno derecho a la OTAN. Con la característica arrogancia y cinismo imperial, visitó y regaló ¡donas Krispy Cream! a los manifestantes acampados en la plaza Maidán, incitó a los grupos nazis de Sector Derecho, Batallón Azov, C 14 y otros, a dar el golpe de Estado y ella se encargó que el primer ministro Arseniy Yatseniuk usurpará la presidencia de forma ilegal. Y el vicepresidente Joe Biden estuvo directamente involucrado en la reorganización del gabinete de Kiev, y maniobró para que a su hijo, Hunter Biden, se le otorgara un puesto con un una remuneración de cientos de miles de dólares, en la compañía de ucraniana Gas Burisma Holdings.

Sigamos. La llamada clase liberal en Europa y EE.UU., aterrorizada por el auge del fascismo que despierta, se ha aliado con los más deleznables políticos del establishment, señores que solo obedecen servilmente las órdenes de los dueños de la industria militar, de los autócratas y de las trasnacionales.

Paradójicamente el derrumbe de la clase liberal, encabezada por los Clinton, los Obama, los Biden, los Macron, los Scholz, sin que fuera su pretensión, ha cedido un espacio político que la extrema derecha ha asaltado sin dilación que, propagandísticamente, condena la guerra en Ucrania a la que califica como un asunto demencial de la OTAN, los acuerdos de libre comercio culpables del desempleo, la estafa a los trabajadores implícita en la globalización, la austeridad y el neoliberalismo.

Este embate de la furiosa ultraderecha ha permeado en Estados Unidos con el disfraz de fascismo cristiano (vaya contradicción) en Hungría, Polonia, Suecia, Italia, Francia y Bulgaria y probablemente en la República Checa, donde la inflación y el aumento de los precios de la energía, ha lanzado a millones de checos por debajo del umbral de la pobreza (que establece el Banco Mundial, parámetro muy por encima de la que aqueja a los pobres de África Asia y América Latina).

Lo que veremos desde nuestro Continente en la primavera del año entrante, después del duro invierno que pasaran en Europa, en el que las familias padecerán apagones continuos, escasez de dinero para comprar alimentos y pagar los recibos de electricidad y gas para los calentadores, –sufrimiento que no les deseamos– lo que apenas queda de la mal llamada democracia occidental se extinguirá sin lugar a dudas.

El extremismo derechista que renace por sus fueros en esos países, se debe al hartazgo de sus ciudadanos ante la exorbitante desigualdad social y la torpeza de los políticos europeos y norteamericanos para resolver la interminable crisis que ha provocado el capitalismo salvaje neoliberal.

En contraposición a esos políticos en decadencia, los líderes de la ultra derecha, que prometen una renovación moral y económica, la venganza contra los enemigos que inventan y el regreso a la gloria perdida, reemergen como salvadores de los sumideros de la política europea. El odio y la violencia fascista, ya en ebullición, se legitiman. En esos países, la otrora clase política en declive y la supuesta civilidad de lo políticamente correcto, es motivo de burlas sardónicas.

El fascismo no desapareció como intentaron hacernos creer los políticos e intelectuales de “Occidente”. Estados Unidos, que se presenta ante nosotros como el que derrotó al fascismo, lo que hizo fue internacionalizarlo. Después de la Segunda Guerra Mundial, los gobiernos de Estados Unidos e Inglaterra ayudaron con pasaportes falsos y documentos de una nueva identidad a cientos de ex nazis y criminales de guerra, a quienes reclutaron para integrarlos a los servicios de inteligencia occidentales y en los regímenes fascistas de Franco en España y en del dictador Oliveira Salazar en Portugal. Apoyaron a las fuerzas de derecha fascista en Grecia, durante la guerra civil de 1946 a 1949 y, posteriormente, respaldaron el golpe militar de extrema derecha en 1967.

La OTAN, engendro yanqui-europeo, también operaba grupos terroristas nazi-fascistas. “La Operación Gladio (ver Wikipedia) fue el nombre clave de las operaciones clandestinas de «resistencia armada» detrás de las líneas enemigas, los quinta columnistas, de la llamada «Red Stay Behind», planeadas por la Organización del Tratado de Bruselas, posteriormente convertida en la OTAN, que actuarían en caso de una hipotética invasión y conquista de Europa occidental por parte del Pacto de Varsovia”.

El fascismo, que nunca murió, solo se agazapó, asciende por sus fueros. La política italiana de extrema derecha Giorgia Meloni ganó, junto a una coalición de ultra derecha, los votos suficientes para ocupar el cargo de primera ministra de Italia. Esta señora se formó en el ala juvenil del Movimiento Social Italiano, fundado por partidarios de Mussolini después de la Segunda Guerra. Ella llama a los burócratas de la Unión Europea “agentes de élites globales nihilistas impulsadas por las finanzas internacionales". Promueve la teoría del “Gran Remplazo”, que no es otra que su visión racista y xenófoba en cuanto a que, si no se detiene la migración de los “no blancos”, estos reemplazaran del poder político y cultural de los blancos.

Meloni y Víctor Orban, presidente de Hungría, declarado por el Parlamente Europeo como anti demócrata según los parámetros de lo que es la democracia para ese Parlamento, forman una dupla digna de estos tiempos.

A la dupla se agregan los del partido sueco, claramente pro nazi, que obtuvo más del 20 porciento en las recientes elecciones generales, para convertirse en la segunda fuerza política de Suecia. Este partido político se formó en 1988 por un grupo pro nazi llamado BSS, Keep Sweden Swedish (Mantengamos Suecia Sueca). De los 30 fundadores del partido, 18 eran nazis, incluidos varios que sirvieron en las Waffen SS, (las Waffen SS eran el cuerpo de combate de élite de las Schutzstaffel -mejor conocidas como SS- dirigidas por Heinrich Himmler. Wikipedia)

En abril Marine Le Pen, la candidata de ultraderecha a la presidencia de Francia, obtuvo 41 por ciento de la votación frente a Emmanuel Macron. En España, el partido de extrema derecha Vox, es la tercera fuerza política en el Parlamento español. El partido alemán de ultra derecha AfD o Alternativa para Alemania es el tercer partido más grande en Alemania.

Estados Unidos tiene su propia versión del fascismo encarnada en el partido Republicano que como dogma adopta el pensamiento mágico, la misoginia, la homofobia y la supremacía blanca de la derecha cristiana y dinamita activamente el proceso electoral de 2024, azuzados por su candidato Donald Trump.

Todo indica que la crisis económica que padecemos hoy en día se asemeja a la que vivió el mundo a mediados de la década de 1920 que se extendió hasta el inicio de la Segunda Guerra Mundial.

Las similitudes históricas en el momento actual

II

El desplome económico del final de la década de los años veinte, fue la piedra de toque para el ascenso al poder de los nazis en Alemania. En las elecciones de 1928 en ese país, el partido nazi apenas obtuvo el 3 por ciento de los votos. Como resultado del Crack del 29, el pico de la crisis financiera en Estados Unidos de 1929, que devino en mundial, a principios de 1932 el 40 por ciento de la fuerza laboral alemana, seis millones de personas, estaba desempleada. Ese mismo año el Partido Nazi se convirtió en el principal partido político en el parlamento alemán.

Antes que prodigar alimentos y bienestar a millones de alemanes hambrientos, el gobierno de la República de Weimar, prisionero de los intereses de los grandes industriales, optó por pagar a la banca privada préstamos ominosos y dictó medidas severas de austeridad. La desesperación y la rabia se extendieron como reguero de pólvora a toda la población. Es notable el paralelismo de Weimar con lo que sucede hoy en EE.UU. y la Unión Europa, rehenes de la industria militar de armamento y favorecedores de los bancos privados y oligarcas de sus países.

Las manifestaciones masivas, encabezadas por los Camisas Pardas (los Sturmabteilung o SA, sección de asalto en español, funcionaron como una organización de carácter miliciano, vinculada al Partido Nacionalista Obrero Alemán -NSDAP- de corte fascista. A sus integrantes se les conocía como camisas pardas para diferenciarlos del uniforme negro de las SS. Wikipedia) culparon de la hambruna y el desempleo a judíos, comunistas, intelectuales, artistas y a la clase dominante y los declararon enemigos del pueblo. El odio era su divisa principal y vaya que se vendió bien. Otro paralelismo con el momento actual en el que la gente común está harta, incluso odia a la clase dominante ya los políticos tradicionales en sus países.

La caída de la República de Weimar estuvo protagonizada por el líder socialista Friedrich Ebert, presidente de 1919 a 1925 y más tarde Heinrich Brüning, canciller de 1930 a 1932, quienes por su ineficacia, desesperados recurrieron al Artículo 48 de la Constitución que otorgaba al presidente el derecho a emitir decretos en caso de emergencia al margen del ya disfuncional Parlamento,

El resultado de esa torpeza política explica la caída estrepitosa de las instituciones republicanas y de los procesos democráticos y, el declive del Reichstag, dio paso al ascenso al poder de los nazis en 1933. Otra similitud con la actualidad: el Parlamento alemán era tan disfuncional entonces como lo son ahora el Parlamento Europeo, los parlamentos en cada país de la Unión Europea y el Congreso norteamericano.

No es imposible pensar que el Artículo 48 de la Constitución de Weimar fue el equivalente a las órdenes ejecutivas utilizadas por Barack Obama, Donald Trump y Joe Biden, para eludir al Congreso de EE.UU. para ordenar asesinatos selectivos con drones, financiamiento delincuencial y oscuro a mercenarios en todos los países en los que quisieron (y quieren) derrocar a sus gobiernos legítimos y otras atrocidades de esos señores cometidas al margen de la ley. Al igual que en la Alemania de la década de 1930, la Corte Suprema y tribunales de Estados Unidos han sido tomados por extremistas de ultra derecha. Un ejemplo siniestro es el gobiernos del demócrata Obama, de quien, paradójicamente, se esperaba fuera el artífice de un cambio profundo en el sistema político y económico de la potencia imperialista. Él interpretó a su modo la autorización para el uso de la fuerza militar expedido en 2002, actuando como juez, jurado y verdugo en el asesinato del ciudadanos estadounidenses. Inició su campaña criminal con el clérigo estadounidense Anwar al-Awlaki. Dos semanas después, ordenó, con un ataque de dron, el asesinato de Abdulrahman al-Awlaki, hijo de 16 años de Anwar, y nueve adolescentes en un café en Yemen.

Obama rescató a los millonarios de Wall Street a costa del sacrificio de las víctimas espoliadas por ellos. Utilizó a su antojo la ley de espionaje para acusar a Chelsea Manning, la militar que actuando con ética y coherencia como ciudadana, entregó miles de documentos militares secretos a WikiLeaks de Julian Assange, que exponían las mentiras en cuanto a las guerras de agresión emprendidas por Estados Unidos, los delitos de tortura y los fraudes al gobierno perpetrados por los contratista paramilitares en las mismas guerras. Y, como colofón, fue el demócrata de origen africano quien expandió de forma masiva el uso de drones militarizados.

En su momento los nazis borraron de un plumazo la pretendida democracia de la República de Weimar. Así como Obama utilizó sus órdenes ejecutivas, los nazis respondieron al incendio del Reichstag en febrero de 1933, que probablemente perpetraron ellos mismos, haciendo uso faccioso del Artículo 48 de la Constitución de Weimar, para emitir el Decreto para la Protección del Pueblo y el Estado. 

Como Obama, Trump y Biden y por extensión la OTAN, los nazis legalizaron el encarcelamiento sin juicio para cualquier persona considerada una amenaza a la seguridad nacional. Abolieron los sindicatos independientes, la libertad de expresión, la libertad de asociación y la libertad de prensa, e invadieron el ámbito de lo privado las comunicaciones postales y telefónicas.

Al igual que en la Alemania de entonces, hoy en la prensa, la radio y redes sociales, la verdad y la mentira son indistinguibles. Los verdaderos demócratas, y no se diga los revolucionarios, son el demonio personificado. La libertad de prensa tan fanfarroneada en “Occidente”, se ha convertido en el principal enemigo de la democracia al estilo occidental (si acaso representativa) y, por su puesto, de los países revolucionarios y de los que practican la democracia directa, participativa.

Los dirigentes de las “democracias occidentales” sirven servilmente a los dictados de los dueños del dinero de la industria de la guerra y las corporaciones transnacionales. Estos oligarcas se benefician con enormes recortes a sus impuestos, dinero que va a parar, junto al de los actos de corrupción, fraudes fiscales a los paraísos fiscales autorizados y promovidos por la banca mundial.

Queda claro que el tránsito de la democracia corrompida al fascismo en toda regla fue, y volverá a ser, de un pequeño paso. El odio por la clase dominante fue y es universal. El repudio a los partidos tradicionales de la democracia occidental, totalmente devaluada, es visible en todo el mundo.

La gente, los ciudadanos del mundo occidental, víctimas de una inflación que está en el pico más alto de los últimos 40 años, verá como un aliado, cada vez con mayor frecuencia, a cualquier figura política o partido político dispuesto a atacar a las élites gobernantes tradicionales. Las víctimas de esa devaluada democracia occidental celebran con júbilo los ataques de la ultraderecha. Mientras más crudos, irracionales y grotescos sean, mayor es el apoyo que reciben. Estas pasiones son de pronóstico reservado cuando en “Occidente” se espera que en invierno los costos de la energía aumenten hasta un 80 por ciento y una tasa de inflación del 10 por ciento, o más, devore los ingresos de las familias.

La sociedad bajo el neoliberalismo ha padecido y padece las políticas perversas impuestas por los gobernantes títeres, que benefician exclusivamente a las élites multimillonarias, que reducen y privatizan los servicios públicos, incluidas las escuelas y hospitales, que han desmantelado la planta industrial, que dilapidan el dinero público y fondos de pensiones en la industria de guerra, que han sometido a sus ciudadanos a intensas campañas de supuesto corte sanitario que paralizan a la sociedad aterrorizada y con miedo, que, cuando los ciudadanos denuncian las políticas neoliberales, recurren a la fuerza pública y militar para someterlos. No es difícil afirmar que esas políticas de los liberales del establishment actual van en caída libre y sin retorno.

En el centro del problema está la pérdida de fe en las formas tradicionales de gobierno y las soluciones democráticas occidentales. El nazi-fascismo en la década de 1930 tuvo éxito a pesar de enfrentar una prensa, una radio, un cine hostiles; un gobierno y una Iglesia en contra que señalaban constantemente las mentiras, lo inalcanzable de sus promesas, los peligros y la locura. Es probable que la gente en su yo interior no creyera en sus teorías y mentiras, pero en su ánimo estaba la necesidad de adoptarlas.

Como en el pasado, estos nuevos partidos nazi-fascistas satisfacen anhelos emocionales. Explotan los sentimientos de desesperación y alienación. Prometen lo imposible de alcanzar, pero sobre todo venden el odio y la promesa de venganza en contra de una clase dominante que traicionó al país.

El nazismo fue una protesta al expolio del tratado de Versalles que rebajo al pueblo alemán a la condición de esclavo. Digamos que fue una protesta contra las corporaciones transnacionales de Inglaterra, Francia y Estados Unidos en aquel entonces. Ese nazi-fascismo que, agazapado permanecía a duermevela, ha despertado con el vigor de un oso después de invernar, contra la explotación, similar a la de 2932, que ejercen ahora las corporaciones multinacionales y los oligarcas occidentales. Más que cualquier otra cosa, la gente quiere recuperar el control de sus vidas, y, si eso conlleva castigar a los culpables de su miseria, que así sea. 

Recordemos que en su mensaje del 8 de noviembre de 2021 el Comandante Daniel, con claridad y visión meridiana, alertó a la humanidad del peligro que se cernía con el renacimiento del nazi-fascismo en Europa y Estados Unidos. Con toda razón llamó al Presidente estadounidense, al Primer Ministro inglés, y a algunos otros dirigentes de Europa fascistas y nazis. Y envió un claro mensaje: ni Estados Unidos ni Europa mandan en Nicaragua.

Invitamos a los revolucionarios de izquierda, a los verdaderos demócratas, a visitar Nicaragua y constatar in situ los avances en materia política, económica y social que ha alcanzado el país desde 2007, que marca el histórico regreso al poder del FSLN encarnado en el Pueblo-Presidente que encabeza el comandante Daniel. Pero lo más importante es venir a hablar con el pueblo para sentir su entusiasmo, su solidaridad, su amor y sobre todo la bendición de vivir libres y en paz.

viernes, 7 de octubre de 2022

COMUNICADO: Nicaragua quiere paz

 

Foto: Carlos Cortez, El 19 Digital.

Por el Comité Europeo de Solidaridad con la Revolución Popular Sandinista.

“Borrar la línea divisoria entre la verdad actual y la opinión es una de las formas que asume la mentira y todas son formas de acción”.

Hannah Arendt


Nicaragua sufrió en abril de 2018 un intento de golpe de estado, con la intervención de una amplia red de ONG´s, partidos políticos de extrema derecha, una parte de la Iglesia Católica, sectores de la burguesía, empresarios e intelectuales orgánicos, que ocasionaron más de 200 muertos, de los que 22 fueron policías nacionales, así como numerosos militantes sandinistas entre otras víctimas. Como ha quedado demostrado por periodistas norteamericanos, esta trama golpista fue tejida minuciosamente en secreto y durante varios años desde la Administración norteamericana, con decenas de millones de dólares de la USAID, con el propósito de provocar un cambio de régimen en Nicaragua. El conflicto provocado desestabilizó el país durante 3 meses con sistemáticos actos de violencia callejera, agitando el descontento en la población que ya se habia desencadenado por el desorden callejero y las ejecuciones planificadas por grupos terroristas organizados por el sector más extremista de la oposición y la élite reaccionaria que tiene el beneplácito de EEUU y la Unión Europea. El resultado de esta intentona fracasada tuvo graves consecuencias sociales en el país, con pérdidas de 120.000 empleos, y un enorme impacto económico negativo, con la destrucción por los violentos, de una parte significativa de  los servicios y equipamientos públicos y grandes daños a la producción, todo ello valorado en 1.800 millones de dólares.

 La recuperación de la institucionalidad democrática se inició con una importante decisión del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, GRUN, a favor de la reconciliación: una amnistía general para todos los ciudadanos y ciudadanas nicaragüenses involucrados en el golpe de estado, no investigados o en camino de investigación, en proceso penal o en cumplimiento de ejecución de sentencias, con el único condicionante de la no repetición de los delitos cometidos.

Posteriormente, las investigaciones judiciales, avaladas por documentación oficial de diversas agencias del gobierno norteamericano, pusieron sobre la mesa de forma fehaciente los nombres de los autores intelectuales y de los financiadores del intento de golpe de estado. Estas personas han sido juzgadas y ahora cumplen sentencia con retención domiciliaria, penas de prisión o son prófugos de la justicia.

La normalidad democrática, por la vía de la Paz, la Reconciliación y la Justicia, culminó con las elecciones constitucionales a la Presidencia de la República y de diputados a la Asamblea Nacional en noviembre de 2021, con una alta participación ciudadana y el resultado de un triunfo aplastante de la coalición Unida Nicaragua Triunfa, encabezada por el FSLN, y liderada por el Comandante Daniel Ortega.

 En menos de tres años Nicaragua se ha recuperado económicamente de las consecuencias gravísimas del fracasado intento de golpe de estado y del impacto de dos huracanes casi consecutivos, consolidando el modelo de desarrollo social, con un crecimiento actual de más del 6%, lo que ha comportado una drástica disminución de la pobreza y pobreza extrema, a través de mejoras muy significativas en los ámbitos de educación, salud, seguridad ciudadana, infraestructuras y transporte, paridad de genero, servicios de electricidad y agua potable, soberanía alimentaria, implementación de energías renovables, etc…

Simultáneamente la Asamblea Nacional inició el proceso de ordenamiento y regulación jurídica de las más de 6.000 ONG’s existentes en el país mediante las leyes 1115 ( Ley General de Regulación y Control de Organismos sin Fines de Lucro) y 1040 (Ley de Regulación de Agentes Extranjeros ) basándose en legislaciones vigentes en muchos países como en USA, Australia, Israel, El Salvador…

Paradójicamente, algunos de estos países son los promotores de campañas difamatorias y de boicots económicos contra el pueblo de Nicaragua, acusando al FSLN de actuaciones ”antidemocráticas”.

Cuando ellos aplican estas leyes es un ejercicio de legítima defensa de “su soberanía” y cuando es Nicaragua la que aplica la Ley, “se trata de una acción dictatorial”.

¡Basta ya de cinismo e hipocresía!

 A pesar del fracaso absoluto del intento de golpe de estado en 2018, algunos grupos antidemocráticos, desde posicionamientos oligárquicos y proimperialistas, continúan intentando desestabilizar el progreso del pueblo nicaragüense hacia la paz, la reconciliación y la justicia social. Y lo hacen con acciones, casi unipersonales, en el interior del país y con actuaciones circenses, en el exterior.

Es evidente que cuentan con recursos económicos ilimitados y voceros acríticos en muchos países, pero ni así pueden imponer la mentira de una Nicaragua “convulsa y dividida”. El pueblo de Nicaragua hoy mismo vive en paz y progreso. Quien lo dude, que visite Nicaragua y lo compruebe personalmente.

El pueblo Nicaragüense continúa en la línea antiimperialista de Augusto C. Sandino, así como en la defensa de la soberanía y la Justicia Social defendida por Carlos Fonseca. Es un pueblo libre y soberano.

El CES-RPS anima a todas las personas de paz a que respeten este camino, esta Revolución y que no intenten imponer modelos de colonialismo ideológico, propios de un mundo unipolar que está en crisis.

El pueblo nicaragüense tiene derecho a tomar sus propias decisiones y que éstas sean respetadas.

¡NI PUDIERON NI PODRÁN!

¡NICARAGUA QUIERE PAZ!

06-octubre-2022

domingo, 2 de octubre de 2022

Uno de los discursos más importantes del siglo xxi

 


Por Jorge Capelán.

El discurso de Vladímir Putin con motivo de la firma de los tratados de adhesión de las regiones de RPD, RPL, Zaporozhye y Kherson a Rusia el 30 de septiembre, pasará a la historia como una de las expresiones más claras de antiimperialismo, anticolonialismo y antirracismo en este siglo.

Merece estar a la par de aquella famosa advertencia del comandante Fidel Castro a George W. Bush el 13 de mayo de 2004 en la Tribuna Antiimperialista de La Habana «Salve César, los que van a morir te saludan», o de aquel lapidario comentario, también dirigido al entonces emperador estadounidense por el comandante eterno Hugo Chávez Frías, aquel memorable 20 de septiembre de 2006 ante las Naciones Unidas: «Aquí huele a azufre».

El discurso tuvo como contexto el reconocimiento a la incorporación voluntaria y por aplastante mayoría de las regiones bajo control ruso en Ucrania, lo que marca un nuevo giro en la guerra.

Aún más significativo desde la perspectiva rusa es que las regiones RPD, RPL, Zaporozhye y Kherson (que en general coinciden con la histórica "Nueva Rusia") en realidad han pertenecido a Rusia desde hace siglos.

«Estoy seguro de que la Asamblea Federal apoyara las leyes constitucionales sobre la aceptación y formación en Rusia de cuatro nuevas regiones, de cuatro sujetos de la Federación de Rusia, porque así fue la decisión de millones de personas. Y eso, claro está, es su derecho, un derecho inalienable que está establecido en el artículo 1 de la Carta de la ONU. Repito, este es un derecho inalienable de las personas, se basa en la unidad histórica; en su nombre vencieron las generaciones de nuestros antepasados, aquellos que, desde los orígenes de la Antigua Rus, durante siglos, construyeron y defendieron Rusia. Aquí, en Novorossia, lucharon Rumiántsev, Suvórov y Ushakov, mientras Catalina II y Potemkin fundaban nuevas ciudades. Aquí nuestros abuelos y bisabuelos lucharon hasta la muerte durante la Gran Guerra Patria», dijo el mandatario.

«Quiero que las autoridades de Kiev y sus verdaderos amos en Occidente me escuchen, para que todos recuerden esto:las personas que viven en Lugansk y Donetsk, Kherson y Zaporozhye se han convertido en ciudadanos rusos para siempre», agregó.

En su alocución, el presidente ruso fue mucho más allá del «conflicto ucraniano» para literalmente poner al desnudo las verdaderas pretensiones del denominado Occidente colectivo.

«Occidente está dispuesto a pasar por encima de todo para preservar el sistema neocolonial que le permite parasitar, de hecho saquear, al mundo a expensas del poder del dólar y los dictados tecnológicos, para cobrar verdadero tributo a la humanidad, para extraer la principal fuente de prosperidad no ganada, la renta de la potencia hegemónica. El mantenimiento de esta renta es un motivo clave, genuino y absolutamente egoísta. Por eso les interesa la desoberanización total. De ahí su agresión hacia los Estados independientes, hacia los valores tradicionales y las culturas originarias, los intentos de socavar los procesos internacionales y de integración fuera de su control, las nuevas monedas mundiales y los centros de desarrollo tecnológico. Para ellos es fundamental que todos los países entreguen su soberanía a Estados Unidos», dijo Putin en una parte medular de su discurso.

Esta definición, a veces descalificada como «fanfarrona», cuando no lisa y llanamente ignorada por la dictadura propagandística occidental, no es pasada por alto por los liderazgos políticos del Sur, que la ven como una exacta descripción de la situación mundial actual, y en especial de la de sus propios países. La «guerra de Ucrania» en realidad es la guerra del Occidente colectivo contra el mundo.

A partir de la definición anterior, Putin explica el por qué del odio antirruso desatado por Occidente a escala planetaria:

«Quiero volver a subrayar: en la codicia, en la intención de preservar su poder ilimitado, es precisamente donde están las verdaderas razones de la guerra híbrida que Occidente, como colectivo, está librando contra Rusia. Nos desean, no libertad, sino que nos quieren ver como una colonia. No quieren una cooperación en igualdad de condiciones, quieren robar. Quieren vernos, no como una sociedad libre, sino como una multitud de esclavos sin alma. Para ellos, nuestro pensamiento y filosofía son una amenaza directa, y por eso atentan contra nuestros filósofos. Nuestra cultura y arte son un peligro para ellos, por lo que están tratando de prohibirlos. Nuestro desarrollo y prosperidad también es una amenaza para ellos: la competencia está creciendo. Ellos no necesitan en absoluto a Rusia, somos nosotros la que la necesitamos», dijo.

En su discurso, Putin hizo una clara exposición de la nación rusa como un hecho eminentemente geopolítico: Rusia es la expresión más fuerte de la unión de los pueblos eslavos de Eurasia en torno a un proyecto civilizatorio que combina la diversidad con una base cultural y espiritual común, no es el invento de una élite, sino la lucha por la sobrevivencia de todo un conjunto de pueblos a lo largo de siglos, por eso su nacionalismo es muy distinto de otros.

«Ya hemos oído sobre la contención de Rusia, China e Irán. Considero que los próximos serán otros países de Asia, América Latina, África y Oriente Medio, e incluso los actuales socios y aliados de EEUU. Sabemos que cuando algo no les gusta, imponen sanciones contra sus aliados: ahora lo hacen contra un banco, luego contra otro; ahora lo hacen contra una empresa, luego contra otra. Es la misma práctica y se ampliará. Apuntan a todos, incluidos nuestros vecinos más cercanos, como los países de la Comunidad de Estados Independientes (СEI)», advirtió.

«Desde todos lados solo escuchamos que 'Occidente defiende el orden basado en reglas'. ¿De dónde vienen? ¿Quién vio estas reglas? ¿Quién estuvo de acuerdo? Escuchen, esto es solo una estupidez, puro engaño, ¡dobles o ya triples estándares! Simplemente, piensan que están tratando con tontos. Rusia es una gran potencia milenaria, un país-civilización, y no vivirá bajo estas reglas falsas y amañadas», dijo el mandatario.

De ahora en adelante, cualquier ataque de los títeres occidentales de Kiev contra las regiones de RPD, RPL, Zaporozhye y Kherson será considerado como un ataque contra Rusia, y cualquier apoyo occidental a Ucrania será considerado como una toma de partido por una guerra directa contra Rusia - algo que a todas luces choca con la opinión pública de los países occidentales a ambos lados del Atlántico. La guerra entra en una nueva fase y no deja a nadie al margen.