Por Jorge Capelán.
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La política de cuarentena aplicada en diversos países del mundo causaría un exceso de 1.4 millones de muertes y 6.3 millones de casos solamente por tuberculosis, indica un informe británico-estadounidense recientemente publicado.
El informe, titulado "El Impacto Potencial de la Respuesta a la Covid-19 Sobre la Tuberculosis en Países con Alta Incidencia: Un Modelo Analítico", establece que "para la tuberculosis (TB) en particular, las cuarentenas en la sociedad ya están dando signos de afectar seriamente los diagnósticos y, potencialmente, la disponibilidad de medicamentos".
En el mismo se busca cuantificar el impacto a corto plazo (5 años) de las cuarentenas contra la Covid-19 hoy en práctica sobre la tuberculosis y al mismo tiempo proponer la mejor manera en que los países puedan restablecer el control de esa enfermedad.
Según el informe, las políticas de cuarentenas afectan negativamente la situación de la tuberculosis de diferentes maneras: Retrasando la atención inicial de los nuevos casos a causa de las restricciones en los movimientos; disminuyendo las probabilidades de diagnosticar la enfermedad al tener que usarse los laboratorios para analizar pruebas de covid; disminuyendo la capacidad del personal de salud para atender casos de TB; retrasando el tratamiento a causa de falta de medicinas o disrupción en el abastecimiento de las mismas; disrupciones en la atención de casos de VIH/SIDA (uno de los grupos más expuestos a la TB).
El único efecto positivo de las políticas de encerramiento implementadas en el mundo sobre la TB sería una reducción en la transmisión de la enfermedad, pero esta apenas llegaría al 10% en cada uno de los países estudiados, siendo ampliamente superada por los factores negativos mencionados arriba.
El informe, redactado por la red Stop TB Partnership, una alianza creada en el año 2000 con el fin de acabar con la tuberculosis, en colaboración con el Colegio Imperial de Londres, la empresa newyorquina de cuidado de ancianos Avenir Health, la universidad Johns Hopkins y la USAID, se basa en un estudio de tres países representativos de tres diferentes situaciones de esa enfermedad: La India, Kenia y Ucrania.
La India fue escogida como representativa de los países con alta carga de TB y un importante involucramiento del sector privado en la prevención y el tratamiento de esa enfermedad; Ucrania representa al grupo de países con un alto porcentaje de TB resistente a las drogas y sistemas de cuidado hospitalarios, mientras que Kenia representa al grupo de países en los que el VIH-SIDA es uno de los motores de la epidemia de esa enfermedad.
En base a esos tres tipos de situaciones, lo autores del informe calcularon las cifras globales del impacto de la cuarentena de la covid-19 sobre el estado de la TB. A los países que no encajaban en ninguna de esas tres categorías se les asignó el impacto promedio.
Los autores del informe reconocen que "aunque pueden haber varias incertidumbres" en esas proyecciones, en realidad estas tienden a subestimar el impacto de la cuarentena debido, por ejemplo, a que no se toman en cuenta las ampliaciones en la atención a la TB que habrían tenido lugar si no se hubieran implementado cuarentenas y, en el caso de países como Kenia, no se ha tomado en cuenta el papel que una desmejora en la atención al VIH-SIDA a causa de la pandemia de la covid-19 habría ocasionado sobre la situación de la TB.
El estudio establece dos escenarios partiendo de que entre más largo es el período de cuarentena mayor será la cantidad de tiempo que demore el restablecimiento del servicio de atención a la TB a los niveles anteriores. Es así como define dos escenarios: El primero, con dos meses de cuarentena y 2 meses de recuperación y el segundo, con tres meses de cuarentena y 10 meses de recuperación.
En el primer escenario de 2 meses de cuarentena, se considera que en los próximos 5 años (2020-2025) se produciría un exceso de 1,826,400 casos de TB (+3.1%), mientras que en esegundo escenario, con 3 meses de cuarentena, el exceso de casos sería de 6,331,100 (+10.7%). En lo que respecta al exceso de muertes, en el primer escenario se producirían 342,500 (+4.0%) y en el segundo 1,367,300 (+16.0%).
El informe constata que la rapidez en restablecer los niveles de atención de la TB lugo del confinamiento por covid-19, y la menor cantidad de tiempo en confinamiento, son críticos para evitar tanto el aumento de casos como de muertes.
A nivel global, por cada mes de cuarentena se calcula un exceso de 608,400 casos de TB y 126,100 muertes. Asimismo, por cada mes de recuperación se calcula un exceso de 420,400 casos de TB y 83,200 muertes.
Sobre los modelos estadísticos aplicados en el estudio se pueden tener distintas opiniones, pero el hecho de que se trate de un informe de organismos activamente comprometidos en la política de la cuarentena, esto es impresionante. A confesión de partes, relevo de pruebas: la cuarentena mata, y la tuberculosis es solo una de las muchas epidemias que enfrenta el mundo hoy en día.
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